Producir en Córdoba XI - Sindicato de Músicos de Córdoba - Temporada 2
En un día cualquiera de un invierno
corto en Córdoba, se concretó una entrevista postergada por imprevistos que ya
son propios de la actividad, donde parece que el día se va develando de acuerdo
a cuánto uno abre la boca. Mientras más y mejor planifiques, más el destino se
reirá de tus planes. Pero eso no es lo importante. Lo importante fue una charla
amena, cordial y con una profundidad propia de tres tipos que se sientan a
dialogar por primera vez con un “extraño” sobre asuntos sensibles.
Comida con tintes veganos mediante,
le metimos pata mientras entraba la siesta. Las luchas por la defensa de los
derechos y la identificación con un colectivo que progresa y revive, fueron el
eje de la conversa. Con ustedes, la primera nota de este nuevo ciclo de
Producir en Córdoba ni más ni menos que con el Sindicato de Músicos de Córdoba,
representado por Gerardo Colinas, David Albano y Víctor Garay:
El Sindicato marchando
- Preguntar “¿Qué significa el ‘Sindicato’?” muy probablemente termine teniendo una contestación parecida a: “Y...se explica solo”, pero, ¿Qué consideran que el Sindicato es para USTEDES? ¿Cuál es la misión en el corto, mediano y largo plazo?
DAVID: Estoy en el
sindicato porque cuando empecé a tocar en el ámbito de la música popular había
un vacío tremendo. No veía que el gremio estuviera presente. Ahora lo
conozco desde los cuerpos estables del teatro, y mi objetivo fue entrar acá para tratar de brindar eso que no tuve cuando lo necesité; Si bien
todos lo necesitamos al sindicato, los que más desprotegidos están hoy por hoy
son los músicos populares e Independientes. Se puede hablar mucho de populares.
Considero que dentro de ellos están los independientes y los dependientes,
porque siempre que vamos a tocar a algún lugar dependemos de alguien... aunque
sea eventualmente.
VICTOR: Yo creo
que los sindicatos no deberían dejar de ser nunca lo que fueron en un
principio: Una unidad de gente del mismo oficio, que se junta para tener una
fuerza mayor frente a una necesidad. Por ejemplo, para que si vas a hablar con
un productor (programador de fechas perdón, así lo separamos bien) y te imponen
sus condiciones, puedas contar con el apoyo del sindicato para hacer más fuerza,
tener más peso, uno que sea legitimado, y generar mejores condiciones. El
sindicato es el único dentro de la ley que
puede otorgar eso, frente al Estado y las organizaciones públicas.
- ¿Y ahora en qué situación legal se encuentra el sindicato? Anteriormente te escuché decir que hay otra agrupación, pero de Buenos Aires, que quiere quitarle la representación de los músicos al sindicato de Córdoba...
GERARDO: Y también
la personería gremial.
VICTOR: Claro. Los
sindicatos están regulados por la ley de
Entidades Gremiales, que entre sus puntos dice que en cada territorio
puede haber una sola representación con personería gremial reconocida frente al
ministerio de trabajo, que es quien puede pelear y negociar las condiciones de
trabajo, negociar convenios colectivos, discutir paritarias, etc.
GERARDO: Y frente
a quien el Ministerio está OBLIGADO a responderte.
VICTOR: Este gremio
se crea en 1921 como “Asociación de Música” y obtiene la personería en 1962,
como Sindicato. Entonces desde el ’62 tiene el reconocimiento del estado con su
personería gremial, cosas que, por des manejos de la gente que estaba acá adentro
(en los ´90s), por falta de participación, por prejuicios hacia el sindicato,
quedó muy vacío muchas veces y representando sólo a los cuerpos estables. Hasta
que hace unos siete años más o menos, con una nueva comisión entre ellos David,
lo retoman y lo ponen al servicio de todos los músicos. Lo que implica levantar
un muerto, porque tenés una organización que hace mucho tiempo no trabajaba y
que además tenía deudas, entre otros problemas. Entonces fue revivir eso.
Darse cuenta que el
sindicato “es la herramienta” que TIENE que servir para representar a los
músicos, y acá quiero decir algo en términos personales: no debe ser una
“asociación de músicos”, porque una asociación es algo que puede hacer
cualquiera y que puede tener buenas intenciones, pero la herramienta LEGAL es
el Sindicato; Esto NO implica que adentro del Sindicato no pueda haber
asociaciones de músicos. El reconocimiento más importante que tiene el
Sindicato es que es una unión de
trabajadores ¿Qué implica eso? Que lo que tengo para vender al “mercado” es mi
fuerza de trabajo. Los que primero formamos la cadena somos los músicos, que de
la “nada” construimos algo. Después ese producto se revaloriza o entra en una
cadena de valor, entonces la mirada que tenemos hoy es revalorizar ese lugar
que le corresponde al músico.
Victor entregando la donación que recaudaron los compañeros de la Orquesta Sinfónica de la provincia de Córdoba para la Orquesta Bella Vista.
- Algo importante que identifico es que cuesta que el músico se vea como un trabajador, lo que implica un obstáculo a vencer y que el músico cambie su mirada hacia su profesión ¿Ustedes qué opinan al respecto?
DAVID: ésa es la
pelea más grande que tenemos como Sindicato, porque primero tenemos que estar
CONVENCIDOS de que somos trabajadores, para después pelear por eso que decimos.
Entender que sin música no hay NADA de lo demás: no hay técnicos, no hay
empresas de sonido, ni luces, ni productor, ni boletería, no hay bebidas, ni
ventas de entradas, ni impuestos, ni municipios que se beneficien, etc.
- No hay festivales, ni cine, ni televisión, ni festivales...
VICTOR: hace un
tiempo armamos un esquema que se llama “La Economía Alrededor del Músico”,
donde está el músico como CENTRO. El músico es el motor, o el tronco de un
árbol. Si mirás el esquema te podés dar cuenta de todo lo que tenés que hacer
para empezar a ser músico. Quizás tuviste que estudiar, comprar un
instrumento...
GERARDO: Y una
preparación institucional, o autodidacta...el músico es la pieza clave.
- Suelo ver al músico, en un sentido formativo incluso, como su propio proyecto. Las organizaciones por lo general comienzan haciendo inversiones, y en ese sentido el músico tiene que invertir mucho para comenzar donde todo sale de su propio bolsillo: invierte en capacitarse, en estudiar, comprar su instrumento, contratar gente que trabaje con él ya sea productores, operadores, stages, estudios...y no se en qué medida hay algún retorno de ese dinero al que denominamos “inversión”...
GERARDO: en el
diagrama que armó Victor se ve muy claro que el problema de todo esto es el
retorno, justamente. El músico le hace
ganar plata a un montón de rubros, un montón de gente; y la vuelta hacia el
músico que sería lo que convertiría este circuito en un círculo “virtuoso” está
truncado, está mal alimentado, está oxidado... Y principalmente hay dos o tres
sectores que están frenando la rueda.
- Que serían...
GERARDO: Los
dueños de los lugares, que son los productores y dueños de las habilitaciones
(no los que se hacen llamar productores y son “organizadores de fechas” o
“mánagers”, que eso es otro tema). El que es dueño de la habilitación es quien
tiene que hacerse responsable del lugar. Pasa mucho que acá dicen: Tengo un
lugar, pongo un escenario, luces, sonido, pero “no tengo nada que ver con la
fecha”. ¿Cómo que no tenés nada que ver con la fecha? Sos el DUEÑO del lugar
donde la gente labura. Estás obligado a que el músico que trabaja ahí cobre
ALGO, que tenga guita. Más en Córdoba donde el 80% del público de rock/pop son
músicos. Que es diferente a otros estilos donde el público es más costumbrista,
como el folklore o el cuarteto, donde es más fácil porque cada banda lleva su público
o los lugares tienen su gente y cada uno le pone precio a su trabajo. En esto,
pareciera que los productores sufren de amnesia. Es como si tuvieran la
vidriera o fueran un MTV local, donde deberías estar agradecido por tocar al
punto incluso de pasar por arriba de los derechos de la gente que toca. Ahora,
el músico que muchas veces no se reconoce como trabajador tampoco se reconoce
como músico ¿Cuántas veces hemos escuchado “No, para tanto no me da, no soy
músico...”? ¿Cómo que no? ¿Tocás la guitarra? Entonces sos músico, reconocete.
Reconocé que es un oficio.
- Con respecto a la formación, ¿Qué opinión tienen respecto a la idea de que un músico que se considere músico en serio, tiene que tener una educación formal completa?
GERARDO: es la
vieja discusión. Según esa visión Jorge Cafrune o Jimmy Hendrix no eran músicos.
DAVID: nuestro
trabajo tiene una parte profesional, o estudio formal, y otra gran parte es el
oficio. Podés haber concluido la educación formal pero si no tenés el oficio
para hacer el trabajo, lo otro no te sirve de nada. Hay una práctica y una
investigación pertinentes al trabajo que se hacen con el mismo “trabajar”.
Muchas veces la gente piensa “miralos, tocan la guitarrita...” con un aire
despectivo.
- Esa es otra cosa que quería discutir. Por un lado el auto convencimiento del músico en verse como trabajador, y por otro lado los prejuicios a los que los músicos se enfrentan a la hora de trabajar, de una sociedad que tampoco considera esta actividad como un trabajo más...
DAVID: a todos nos
ha pasado. La misma sociedad te pone todas esas cuestiones en la cabeza. Es
algo cultural. Acá solemos hacer el chiste “Ok, sos músico pero ¿De qué
laburás?” (risas). En muchos núcleos familiares se implanta el fantasma de que
de la música no se come...
VICTOR: a menos
que seas, no se...Ricky Martin. Yo creo que esa discusión es una de las más
profundas de las que llevamos adelante. Muchas veces en las charlas que damos
sale la pregunta “¿Y qué músico famoso está en el sindicato?” A lo que nosotros
contestamos “Te puedo nombrar algunos, pero el músico ‘famoso’ no necesita de
un Sindicato”. Porque un músico que es famoso no necesita juntarse a resolver
todas estas cosas.
DAVID: además ese
tipo de músicos son empresarios. Son los que tienen que tener a sus
trabajadores en blanco, a través del Sindicato o algún convenio.
- O deberían... (risas)
VICTOR: yo músico,
me pienso más como un pequeño productor del norte cordobés, que tiene su
pequeña parcela donde trabaja la tierra y puede comerciar su producción, que
como si fuera La Serenísima.
GERARDO: por
volúmenes, cantidad, y posibilidad de generar. Porque si volvemos a la teoría
económica (trabajo, capital, tierra), vos podés lograr por vos mismo la
cantidad de trabajo según las horas que tenés. No podés usar el tiempo de
otros, a no ser que ya seas un Jorge Rojas, o una persona que tenga una
estructura que lo permita. O te vas al otro extremo, como Farías que es dueño
de no se cuántas bandas y no toca. Hay muchos ejemplos.
VICTOR: cuando se
habla del músico independiente se pone de ejemplo al “industrial de la música”.
Es muy difícil pensarse así como laburante, porque estás apostando recursos
para invertir en tu empresa para recuperarlos cuando seas “famoso”. Es como el
cuento de la zanahoria. Mientras tanto
uno existe...¿De qué vas a vivir? Esa visión de la música, y esto es muy
personal, relega a que los únicos que puedan hacer música sean las personas que
tienen recursos y vengan de determinado sector social. O sea que el que es
pobre y sólo tiene su fuerza de trabajo y su creatividad para tocar aunque sea
la cuchara, por ejemplo, no va a poder hacer música porque no va a tener cómo
invertir para “llegar” a la vidriera que lo haga famoso para cortar tickets o
vender discos.
DAVID: Está bueno
que se de esto de “llegar”, pero por ejemplo yo hace muchos años hago música y
vivo. A veces más ajustado que otras, pero pago todas las cuentas y vivo.
Tocando en circuitos de barrios.
GERARDO: cabe
aclarar que en las épocas doradas del tango, o de otros estilos no tan lejanos,
a nadie se le hubiera ocurrido ir a tocar y que no les fueran a pagar. Te
rompían todo.
Concierto público en contra de los descuentos a salarios de los trabajadores del Teatro San Martín
- Cada quién tiene su opinión formada sobre esta pregunta, por eso me gusta hacerla siempre ¿Qué significa para ustedes vivir de la música?
VICTOR: en
principio me parece que hay que valorizar al intérprete. No importa si en un
estilo o en veinte. Si empiezo a cobrar por eso, voy a vivir de la música, porque
con eso me pago el taxi, el bondi, me compro las cuerdas nuevas, mejoro el
instrumento, pago el alquiler, la luz...ese es el primer paso. Después otra
opción es componer o escribir o producir “para...”. Vos que sos
productor...esas cosas están ahora mucho más valoradas que ir a tocar. Ahora
probablemente alguien te diga “¿Cuánto me cobrás por producirme el disco?”
porque estás dentro de la estructura de la industria, porque necesitas
productor artístico para que el disco suene, etc. Y está esa cuestión de que si
es un productor que ya hizo algo para alguien famoso “también me puede hacer
famoso a mí”. Entonces si tenés que pagar todo vos, tenemos que saber todos que:
si toco...cobro. ¿Mucho, poco? Eso va a depender de un montón de factores, pero
no puedo no llevarme ni un peso. Porque así valoramos todo el resto de la
cadena también. Un músico hace muchas cosas: transcribe, compone, arregla,
graba...
DAVID: raras veces
se vive de un solo proyecto. A lo mejor también das clases, tocás con otras
bandas y estilos. Hacés muchas cosas hasta que te hacés un nombre y seguís
progresando.
GERARDO: el
paradigma del músico se me hace que es el mismo que el de un empresario, que
es: el éxito. “no soy músico porque no toco así, porque no me reconoció tal, o
alguien dice que soy músico entonces recién ahí ‘debo ser músico’”. Es lo mismo
que el empresario: un guaso que va por la vereda vendiendo ropa o un almanaque,
es un empresario ¿se reconoce como empresario? Imposible. Nunca lo va a asumir,
si no es que tiene muchas personas a cargo o una tarjeta que diga “CEO”,
“Gerente”, etc.
- No lo define la actividad comercial, sino el éxito o lo que él considera éxito...
GERARDO:
exactamente. El éxito, el lugar donde haya llegado...y siempre según la mirada
del otro aparentemente. Entonces la cuestión es cambiar la cabeza en estos
temas y entender que la música es un oficio. Yo tenía un profe en la facultad,
Vicente (Tito) Mocho, bastante controversial si se quiere, pero el primer día
de clase dijo algo que me quedó: “Ser músico es un oficio. Ser compositor se
hace componiendo.”, y “la universidad es consulta”, fueron las frases que me
quedaron registradas. De ahí partimos.
VICTOR: volviendo
a lo anterior sobre la actividad y la educación musical, la escritura de la
música es posterior a la música en si. Siempre decimos: ¿Qué es un músico que
tenga que cobrar en algún lugar donde toca? Si tocás en un lugar donde se
ejerce un lucro, entretenés, entregás cultura o hacés que la gente se quede un
rato más tomando una cerveza y alguien gana más plata con eso, vos tenés que
cobrar. Así seas Paco de Lucía, Stravinski o el pibe que hace beatbox en el
banco. Así de sencillo. Ahora si sos muy bueno, probablemente tengas mejores
trabajos que otro que no pueda ni siquiera leer música o le cueste más. Ahora,
muchas veces sucede que hay gente en la industria que no tiene ninguno de esos
atributos que debería tener un músico, como Maluma o Marama y la pegan, y nadie
discute que sean músicos por más que desafinen ó que arreglen feísimo...
- Hay algo curioso que me pasa en Córdoba en lo que respecta a salir por ejemplo a Buenos Aires. Veo mucha gente resentida con quienes se pudieron ir y llegar a tener otra trascendencia ¿Por qué puede ser que pasa esto, si es que lo ven ustedes también? ¿Por qué persiste la idea esta de Buenos Aires o nada?
DAVID: porque la
guerra la ganaron los unitarios. La ganó Sarmiento y desde esa época todo
funciona en Buenos Aires. Siempre fue así. Tenés que registrar un nombre o una
patente, y tenés que hacer el trámite con un domicilio en Buenos Aires. Todo lo
hacen funcionar allá.
VICTOR: si
volvemos a esto que preguntabas sobre la personería, que te decía que es por
territorio, este sindicato tiene una historia de disputa con el SADEM
(Sindicato Argentino de Músicos), que son argentinos pero tienen personería y
representación gremial en Capital Federal y partidos del Gran Buenos Aires,
Tierra del Fuego, Jujuy y Misiones. Históricamente se han querido quedar con la
representación de Córdoba porque, si lo ves en términos de facturación, se
podrían quedar con los porcentajes de los festivales... es decir, ganarían
MUCHÍSIMA PLATA.
GERARDO: que es lo
que nosotros queremos recuperar para los cordobeses. Si se hace acá, que quede
acá. Para los músicos de Córdoba.
La consigna
- Hablemos de qué hace falta para que ustedes se queden con esa posibilidad...
VICTOR: lo primero
es el consenso, de que ésta es la herramienta para unir a los músicos y
fomentar proyectos. La idea es acompañar a quienes lo integran, o sea todos los
músicos de la provincia.
GERARDO: y ser
verdaderamente representativos. Que el músico sepa que está el Sindicato, lo
avale y se apoye como una herramienta de construcción y negociación
principalmente.
VICTOR: pero para
que los sindicatos no se transformen en eso que dicen en la tele (ese cuco que
es el gordo con los anillos de oro y diamantes) hace falta gente que participe.
Porque los sindicatos no son eso, siempre fueron un grupo de gente pobre y
laburante que se tuvo que juntar para luchar contra alguna situación y tener más
peso. Ése es el espíritu del sindicato. Buscamos que sea esa herramienta de
participación donde se opine y es bueno saber que el sindicato vive de los
recursos de los afiliados, de dónde se obtienen los recursos de este sindicato,
que es el 1% del aporte voluntario de quién se afilia, de los trabajadores
estables de la provincia, de los municipales y algunos independientes que se
afilian. Eso es todo. Con eso nos movemos. Esa plata es la que permite que
podamos financiar proyectos, préstamos para los afiliados, poner una sala,
hacer una gestión de prensa, etcétera. Esa plata sale del aporte de los
compañeros. Entonces, pensar en poder tener un aporte además de la industria de
la música que se sirve del trabajo de los músicos (que muchas veces no devuelven
nada y que maltratan a quienes hacen la música), y que vuelva como un aporte
solidario de los empresarios de la música hacia el sector para que el sector se
desarrolle, porque después ellos van a poder valerse de todos nosotros. Si
desarrollo recursos para poder estar tocando y laburando de esto todo el
tiempo, voy a tener muchos mejores proyectos. Si estoy 12 horas trabajando
arriba de un taxi no puedo desarrollar la misma calidad de proyectos que si
estuviera prestando atención a la música todo el día. Las condiciones
materiales en ese caso serían diferentes. Nosotros un poco buscamos eso, y la
disputa con el SADEM es que quieren quedarse con la personería por eso. Cuando
tratamos de acercarnos a los que deberían ser compañeros preguntamos “¿Vamos a
laburar por los músicos?” y nos cortaron el rostro.
GERARDO: “Yo sigo
lo que me digan de Buenos Aires”, fue la respuesta del secretario del SADEM en
Córdoba.
- ¿Esa fue la contestación?
GERARDO: sí. Esa
fue la respuesta que tuvimos.
VICTOR: nosotros
tratamos de que no se vaya todo afuera, no puede ser que acá generemos y todo
se vaya. Pareciera que no tenemos la capacidad de aislarnos de esa idea del
“interior”. Este sindicato tiene 100 años. Antes que el SADEM, existía una
asociación de músicos en Córdoba. Aunque sea por respeto deberían poder tener
la humildad de juntarse.
- ¿Tienen idea de cuántos afiliados al Sindicato hay actualmente?
VICTOR: cerca de
mil cuatrocientos. Activos.
GERARDO: en
números hay alrededor de dos mil y pico.
VICTOR: activos
son los que hacen el aporte. El primer número que te puedo dar es de un censo
que quise hacer cuando estuve en el MUCC, que tratamos de hacerlo con la
universidad y no se pudo porque es una gestión que requiere mucho dinero. En un
momento logramos hacer un censo sobre fechas de cuarteto y había alrededor de
ochenta fechas por fin de semana, en una agenda de gente que la mantenía muy
completa pero siempre hay más de lo que uno puede contar. Eso es solamente
cuarteto.
GERARDO: después
están los músicos de los cuerpos estables.
- ¿Los cuerpos estables están representados por el Sindicato?
DAVID: todos. Sólo
los defiende el sindicato de músicos. No está el SEP ni otro que se cruce. En
el caso de los músicos de la municipalidad, los maneja el SUOEM pero no se mete
a dirimir ninguna cuestión con los músicos. Ellos nos consultan cuando hay
alguna situación particular con músicos, por respeto, por trabajo conjunto y
porque les cuesta bastante entender nuestro trabajo que es muy diferente al de
ellos, o de otros empleados que trabajan diferentes horas, con diferentes
categorías, etc.
GERARDO: el músico
quizás es uno de los pocos trabajadores que siempre quiere trabajar más.
DAVID: no tenés
idea el pánico que hay en los cuerpos estables cuando no hay fechas. “No nos
programan, no tocamos, qué va a pasar”. Y siempre están dispuestos a laburar
más y en repertorios más difíciles, eso está bueno. La provincia está muy
aceitada en lo artístico. Las funciones están delimitadas, hay reglamentos que
se cumplen bastante. Está el director general de la agencia que sería la
Secretaría de Cultura de la Provincia, el director de teatro, por ejemplo, y
después están los directores de cuerpos que son los responsables de la
programación artística de cada uno, consultados con el director del teatro,
etcétera. El líder de la programación es el director del cuerpo.
GERARDO: antes se
usaba mucho cuando había directores culturales también. En los pubs, los
cabarets, etc.
La NUEVA sede del Sindicato
- En este panorama para los músicos independientes: ¿A quién recurrirían para poder trabajar más? Siendo que no tienen la posibilidad de formar parte de un cuerpo estable, con trabajo continuamente...
GERARDO: en el sindicato pueden apoyarse para tener mejores condiciones o condiciones mínimas, que haya un pago si o sí.
DAVID: que los
contratos sean dignos, que los mínimos sean decentes y los pagos sean en un
tiempo prudencial.
VICTOR: el músico
es el pilar de esto. Tenemos que volver a este valor.
GERARDO: los
números tienen que cerrar con el músico adentro. No hay otra forma. Acá ya está
funcionando. Hay fechas que se hacen en lugares con clientela fija donde va un
músico a tocar y cobran. El lugar tiene su habitué, su clientela, a quienes los
tratan bien, les dan de comer, la cosa funciona y le pueden pagar al músico
como corresponde; En la mayoría de los casos te estás volviendo con el
instrumento más gastado, cuerdas rotas, o lo que fuera, te tenés que pagar un
taxi y esa fecha fuiste para atrás. La onda es poder cobrar tu laburo y poder
llegar a fin de mes, no ser famoso. Es simple.
Hace poco me pasó
que bajó un pibe de un taxi y cayó a vender dos entradas para Guernica.
Compramos dos entradas porque íbamos con un amigo. Fui y hablé un poco con el
pibe y me cuenta que estaba emboladísimo porque vendían anticipadas a $150 cada
una y me dice que en Edén Entradas habían sacado un 2x1. Son esas cosas las que
cagan todo. Porque tenemos un sector miope, mentecato, de productores, dueños
de lugares o habilitaciones, que no están regando lo que tienen que regar, no
abren la canilla y se perjudican ellos mismos porque hay muchísimas bandas que
ya no quieren tocar más en esos lugares, y bandas importanes. “Sur Oculto” no
toca más ahí, “IAH” no toca ahí, estos pibes de los que te cuento no tocan más
ahí. Y encima tratan para la bosta a los clientes. Entonces nosotros como
Sindicato tenemos que interceder en estos temas; porque uno de los problemas de
los que hablábamos para que la rueda gire son los dueños/productores y otro son
los comunicadores.
- Son funcionales al problema...
GERARDO: son TRAIDORES. Mirá la palabra que te digo. Vienen a traer cosas de afuera. Son Colón con los espejitos. Te vienen a hablar de bandas de Estados Unidos, de Inglaterra, del Congo Belga... “¿...viste la banda que salió ayer en Kuala Lumpur, con el bajista de no se quién y el batero de no sé cuánto...?” ¿Me explico? Fijate PRIMERO lo que hacen tus vecinos y compatriotas. Amá la música de tus amigos. Vení un día emocionado porque escuchaste un tema del primo, del amigo, del hijo del kiosquero. Mostrala, programala para que suene en la radio...
- Es un desastre, y me imagino que tiene que ver con algo que hablábamos en otra oportunidad: No son “comunicadores” hablando de algo que saben. No es gente preparada para hacer lo que están haciendo de manera responsable. Pasa mucho en los medios esto de que participa gente haciendo notas, cuando hablan en radios, cuando promocionan fechas, que tocan de oído. Y eso no ayuda, al contrario.
VICTOR: yo
pregunto, además de reforzar esos conceptos, la escena ¿Tiene que ser exitosa
antes que estén los comunicadores? ¿O nos hace falta toda esta gente para que
crezca? A mí me parece que es un poco de todo. Por ejemplo, si vos tenés un
lugar de música en Córdoba, sos Espinosa y tenés Guernica: loco, estás viviendo
de toda esta gente, entonces aportá. Ya la hiciste. Sos empresario. Tenés la
posibilidad de invertir, que te vaya mal y tener otra oportunidad más de ganar
más guita. Sos empresario. El músico no puede hacer eso. Y acá ¿Quiénes son los
empresarios? Los dueños de los lugares, no los músicos. Tampoco el programador
que ponen al medio es un empresario, porque no produce nada, organiza una fecha
y le cobra a los músicos para pagarle el lugar al dueño. Es un delirio; ponete
un lugar o ponete a tocar pero no le hagas el juego al empresario que está
haciendo la planchita diciendo que es “productor de rock”. Y encima hay quienes
tienen el tupé (productores, programadores y comunicadores) de decir “suenan
como el culo, no tienen productor, no tienen operador, etc”. Y cuando vos vas
al boliche los baños están sucios, el techo se llueve, no hay aire, te arrancan
la cabeza en la barra. Los empresarios tienen que invertir, que son los que
pueden correr más riesgos. Si eso no sucede por motus propio, nosotros
trataremos de hacer el contrapeso para que suceda. Porque sí queremos que haya
trabajo. Pero trabajo en serio.
DAVID: el que sabe
hacer la música la hace, el que sabe menos la enseña, el que sabe menos los
representa y el que sabe mucho menos, pone un bar y la explota (risas).
- ¿En qué estado está la Ley de la Música en Córdoba?
VICTOR: creemos
que dignificar el laburo es cobrar por el trabajo. Aunque sea un mínimo, pero cobrar.
Los músicos de esa manera pueden decidir qué hacer: grabar, pagar fotos, hacer
un single, un video...
Con la ley
llegamos a un punto (sumados a un legislador y a SONAR) que no tenía una
solución. Llegamos a la posibilidad de llegar a un instituto de fomento, o más
bien un concejo. Queríamos una herramienta que permita interactuar con los
mecanismos del estado, para que sea consultivo y ejecutar algunas políticas
públicas a mediano y largo plazo. Nos ofrecieron una forma que no nos
convenció: era una empresa de economía mixta donde no podemos participar por la
naturaleza del Sindicato. Así que estamos en una etapa de recomposición.
GERARDO: Ahora estamos
tratando de lograr convenios colectivos de trabajo con la Cámara de Bares,
Restaurantes y Hoteles, para tratar de generar condiciones mínimas, lograr la
exención impositiva, fomento, etc; para darles algunas condiciones más potables
a los lugares, como subirse a la ley, darle una hora más a los bares para que
las bandas puedan tocar, etc. De a poco iremos haciendo convenios para otros
rubros y lugares más grandes.
Hasta aquí la
charla que mantuvimos en el Sindicato de Músicos de Córdoba. Una experiencia
necesaria, si queremos discutir nuestros problemas como ámbito artístico que
quiere encaminarse a profesionalizar el trabajo de todos quienes formamos
parte.
Para poder
asociarse al Sindicato de Músicos de Córdoba, pueden dirigirse a su nueva dirección
en Pasaje Groppo 1137, Córdoba Capital.
Tambien pueden
comunicarse a través de Facebook en la siguiente FanPage: https://www.facebook.com/sindicatomusicoscordoba/
Invito a que todos
tengamos la humildad de reconocer que tenemos que acercarnos. Demos el primer
paso para construir, en vez de sacar ventaja. Le agradezco a Gerardo, Víctor y
David que me recibieron con los brazos abiertos para discutir realidades que
indignan, duelen y otras que dan esperanza, y nos despiertan.
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